top of page

"ME VOY SATISFECHO"

Después de una final accidentada, suspendida por la lluvia, y con conflictos en el parante donde se ubica la varilla, Germán Chiaraviglio se mostró feliz por meterse entre los mejores 12 de la prueba.

Está en el cielo. Después de todo lo que sufrió para volver a competir (nueve operaciones en uno de sus pies), el año pasado fue de ensueño. Finalista en el Mundial de Beijing y plata panamericana en Toronto, Chiaraviglio esperó mucho este momento. El momento de volver a ser parte de la familia olímpica. En 2008, fueron tres saltos nulos en su primera vez en la gran cita del deporte. Otra época. Otro Germán. Ahora, después que la vida (y su esfuerzo) le haya dado una segunda oportunidad, el santafesino atraviesa un renacer deportivo.

 

En la clasificación, Chiara saltó 5.70 metros, su mejor marca del año en el torneo top de la temporada. Eso le alcanzó para hacer historia y meterse en la final de garrocha. La definición tuvo todo tipo de condimentos. La lluvia retrasó la prueba más de una hora y, en el regreso, pudo superar en el tercero y último intento, los 5.50 metros. Después de eso, una nueva demora lo afectó de forma directa: personal de la IAAF no conseguía subir el parante y su salto volvió a retrasarse. A continuación y cuando lograron estabilizar la varilla, un juez le pasó por el medio de la corredera cuando iba por su primer intento en los 5.65 metros. Sí, leen bien. Germán reclamó y le volvieron a dar el primer intento, pero no pudo con la marca y finalizó en la 11° posición de la final.

 

"Me voy satisfecho y conforme por estar en el nivel de los 12 mejores. Estuve muchos años para llegar acá, y ratificar lo que hice en 2015 es muy lindo para mí", contó Chiaraviglio, que todo lo que ocurrió le pareció muy extraño. "Fue una prueba muy accidentada. Me costó más que en la clasificación y hubo un intento casi válido que era para aprovecharlo. Igual, llovió para todos", expresó el atleta.

 

Si le preguntaban hace algunos años, Germán no imaginaba lo que vivió en Río. Aquel campeón mundial juvenil que deslumbró al deporte argentino en 2006, pasó años difíciles, en las sombras de una carrera que pareció que lo dejaba en el camino. Pero él, con su esfuerzo sostenido y amor por lo que hace, volvió. Y tuvo un premio que nunca olvidará.

 

  • YouTube - White Circle
  • Facebook - White Circle
  • Twitter - White Circle
  • Instagram - White Circle
  • Google+ - White Circle
bottom of page